Ella es Mamá Francisca, madre de agua salada, un espíritu ancestral que emerge de la fuerza del océano. Representa la profundidad y la grandeza del mar, llevando consigo la sabiduría de las aguas eternas.
En esta pieza se aprecia todo el trabajo de realismo que practico en cada una de mis representaciones: desde la transformación minuciosa de su rostro, al que le regalo una expresión única e irrepetible, hasta el acabado de su piel, ella es prieta original resalta con elegancia y fuerza espiritual.
Mamá Francisca mide 28 pulgadas y luce un imponente vestido de guinga azul con encajes, acompañado de collares y detalles que evocan la riqueza de lo místico. Su cabello rizo y natural, aunque recogido con un turbante blanco, fluye hasta la cintura, reflejando la abundancia y la fuerza vital que habita en ella.Agregue 7 manillas
Cada detalle de esta representación —su porte, su vestimenta y su energía— ha sido concebido para transmitir que no es solo una muñeca, sino un símbolo de conexión espiritual con las aguas y los ancestros.